MADRID, España.- Ante la escalada de violencia que atraviesa Cuba, el proyecto Shanti ha creado el Observatorio contra la Violencia (OcV), que tiene entre sus principales objetivos respaldar el espacio Conversaciones Sobre Violencias, que Shanti viene desarrollando en algunas comunidades y conformar el Subregistro de la Violencia en el país.
El Observatorio se crea “como iniciativa de la sociedad civil para seguir enlazando iniciativas y acciones que den respuestas a la tendencia creciente en las distintas formas de violencia en Cuba”, define el acta de fundación del OcV, a la que tuvo acceso CubaNet.
El documento recuerda que en Cuba, donde la violencia se genera también desde el Gobierno, se necesita desarrollar una metodología particular que recoja, evalúe y analice cómo se manifiesta la violencia en la Isla y cuál es su relación orgánica entre sus distintas expresiones.
Para “identificar, transparentar, concientizar y trabajar para neutralizar, reducir y eliminar las distintas formas de violencia en Cuba”, se seguirán metodologías empleadas por Observatorios del mundo.
La metodología particular se irá definiendo en el propio trabajo del OcV, que se iniciará con el Subregistro de la Violencia en Cuba, así como con informes sobre el contexto y las causas que la suscitan, explican los promotores de la iniciativa.
El texto señala también que la misión del OcV es convertirse en una institución que dé cuenta, rigurosamente, de esta realidad en el país y la de concientizar a la sociedad cubana “acerca de la necesidad de arrimar esfuerzos para desarraigar un fenómeno ya endémico”.
El proyecto Shanti, creado en junio pasado como estrategia global contra la violencia en Cuba, está respaldado por varias plataformas disidentes, como D’Frente, el Consejo para la Transición Democrática en Cuba (CTDC) y la Mesa de Unidad de Acción Democrática.