MIAMI, Estados Unidos. — El Senado de Estados Unidos aprobó este miércoles “por unanimidad” una ley que renombrará Oswaldo Payá Way la calle que pasa frente a la Embajada del régimen cubano en Washington, DC.
La noticia fue difundida en redes sociales por Rosa María Payá, hija del fallecido líder opositor cubano.
“El Senado de los Estados Unidos aprobó por unanimidad una ley para renombrar la calle frente a la embajada de la dictadura en Washington, DC como Oswaldo Payá Way. Después de años llevando nuestro mensaje al congreso, finalmente los asesinos de mi papá tendrán que pronunciar su nombre”, señaló la activista en Twitter.
El proyecto de ley bipartidista fue presentado por los senadores republicanos Ted Cruz (R-TX), Marco Rubio y Rick Scott (R-FL), y por los demócratas Bob Menéndez (D-NJ), Dick Durbin (D-IL) y Ben Cardin (D-MD).
El senador Bob Menéndez indicó que, pese a representar a diferentes fuerzas políticas, los legisladores “comparten firmemente la visión de Payá de una Cuba libre y democrática, una en la que su pueblo pueda denunciar la opresión sin temor a represalias”.
Por su parte, Marco Rubio expresó que el renombramiento de la calle “servirá como un recordatorio diario para los matones asesinos de las muchas muertes de las que son responsables”.
La ley para cambiar el nombre a la calle que pasa frente a la sede diplomática del régimen en la capital estadounidense se produce apenas dos días después de que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) hiciera público un informe en que responsabiliza a la dictadura cubana por la muerte de Oswaldo Payá y Harold Cepero, quien fallecieron el 22 julio de 2012 en la provincia de Granma.
La conclusión de ese organismo continental, recogida en el Informe de Admisibilidad y Fondo No. 83/23 del Caso 14.196, establece que “el Estado cubano violó los derechos a la vida, honra y libertad de expresión de ambas personas”.
El documento de la CIDH identificó “indicios serios y suficientes para concluir que agentes estatales participaron en las muertes de Payá y Cepero. Asimismo, precisó que “lo ocurrido a las víctimas se enmarcó en el contexto de la persecución y represión estatal contra personas disidentes políticas y defensoras en Cuba, con el objetivo de obstaculizar o paralizar la labor de defensa y promoción de los derechos humanos”.