LA HABANA, Cuba.- El 1.º de agosto de 1992 la plataforma MTV estrenó un video que sacudió a la teleaudiencia. “Jeremy”, de la banda Pearl Jam, irrumpía en los hogares estadounidenses con la escalofriante historia, basada en hechos reales, de Jeremy Wade Delle, un adolescente de 16 años natural de Texas, víctima de bullying, tan afectado psicológica y emocionalmente por los abusos, que terminó suicidándose en frente de su clase.
La canción, incluida en el espléndido disco Ten (1991), abordó con toda crudeza y dolor uno de los problemas más acuciantes en la adolescencia, sin escatimar lirismo ni regodearse en la tragedia. “Jeremy spoke in class today” (Jeremy habló en clase hoy) es la frase que sella el destino de un chico callado, atormentado, que en los tiempos que corren quizás hubiese preferido matar a sus abusones en lugar de suicidarse. Fue precisamente su historia, más cargada de sufrimiento y desesperación que de ira y rencor, lo que motivó a Eddie Vedder a escribir el tema, tras haber leído la noticia en un diario.
El videoclip produjo tal shock que en varios países fue censurado bajo el argumento de que exponer tan abiertamente el tema del suicidio podía influir de forma nociva en la sociedad. No obstante, más allá del triste suceso, la canción visibilizó los conflictos que más inciden en una etapa tan vulnerable como la adolescencia y que habrían sido el detonante de la acción de Jeremy: dificultad para adaptarse a la escuela, falta de atención en el hogar, soledad y retraimiento.
Además de haber sido un hit en toda regla, el tema dejó claro que el bullying era un problema de la generación de los años noventa; un mal que, si bien había existido siempre, comenzaba a expandirse peligrosamente en el ámbito estudiantil de la época. Pocos escucharon con atención, hasta que comenzaron a producirse trágicos episodios en los que el chico abusado no se inmolaba sin antes saciar su rabia en los cuerpos de sus victimarios, o de quienes a diario presenciaron el abuso, impasibles.
“Jeremy” puso el foco sobre un asunto incómodo que en nuestros días sigue siendo un problema grave, a pesar de las numerosas políticas implementadas para intentar frenarlo. El video ganó cuatro premios MTV en la edición del año 1993, y está incluido entre los veinte mejores realizados por esa cadena televisiva.